En un contexto preocupante para el colectivo autónomo en la Comunitat Valenciana —donde casi el 50% de los nuevos autónomos cesan su actividad antes de los 18 meses, según el informe 2024 de UATAE—, Fundación Novaterra consolida su compromiso con un modelo de autoempleo y emprendimiento con impacto social, sostenible e inclusivo, como vía real de inserción y transformación personal y profesional.
Desde sus programas Dona Emprèn y Emprender sin liarla, la Fundación ha acompañado en 2024 a más de un centenar de personas, especialmente mujeres en situación de vulnerabilidad y jóvenes sin oportunidades, en el diseño y puesta en marcha de iniciativas viables. Estos acompañamientos han generado negocios reales en sectores como la hostelería, la moda sostenible, la estética, el turismo social, la psicología y el comercio ético.
Frente a un modelo de autoempleo precario, masculinizado y sin capacidad de crecimiento —según UATAE—la Fundación aporta formación, mentoría, microcréditos y acompañamiento personalizado, fomentando el empoderamiento económico y la creación de redes de apoyo para personas sin acceso a recursos financieros o institucionales.
Desde la fundación se diferencia el autoempleo del emprendimiento: el autoempleo es trabajar por cuenta propia prestando un servicio que depende directamente de la presencia de la persona; mientras que el emprendimiento implica crear y desarrollar un negocio escalable, capaz de funcionar independientemente del tiempo y la presencia directa de quien lo inicia, generando empleo y automatizando procesos.
Para garantizar estabilidad, relevo generacional y segundas oportunidades para los autónomos, Fundación Novaterra propone el autoempleo y el emprendimiento social, que se acompaña desde lo humano, como una propuesta estable, transformadora en una sociedad donde este modelo económico tiende a la baja y como dice el informe “Es hora de reconocer que son una parte esencial de nuestro tejido productivo».